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¡Un Asia, Busán Global! El 29 de septiembre de 2002, se inauguraron los 14tos. Juegos Asiáticos de Busán con aproximadamente 9.000 atletas y entrenadores de 44 países OCA (Concilio Olímpico de Asia), incluyendo Corea del Norte, y promovió las relaciones amistosas entre sí.
En estos 14tos. Juegos Asiáticos, algunas personas llenas de energía animaron el estadio. Ellos son los alentadores de la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial.
La Iglesia de Dios realizó la campaña “Recoja la Basura” en la Copa Mundial FIFA 2002. En ese tiempo, los miembros de la Iglesia de Dios en la zona de Busán apoyaron incondicionalmente a los equipos de los países pequeños que no habían enviado a sus propios alentadores, y también a los países adonde habían sido enviados sus misioneros. Crearon una atmósfera alentadora, captando la atención de todas las personas en el estadio.
Mientras los ojos de los medios de comunicación y la mayoría de las personas se enfocaban en los alentadores de Corea del Norte y en los deportes populares, los miembros de la Iglesia de Dios alentaron efusivamente a los atletas que participaban en los eventos deportivos poco populares.
Los atletas y sus entrenadores recibieron entusiasmo por su ferviente ánimo y jugaron mucho mejor de lo que imaginaban, mirando las banderolas y pancartas con pasajes escritos en sus idiomas.
El pastor Pyo Gi-sang que cooperó con la Ciudad de Busán en el asunto de las actividades de los alentadores, expresó: “En cada estadio, el país que apoyábamos obtenía una buena marca y la atmósfera se llenaba de euforia. Los funcionarios comprendieron la importancia de los alentadores y nos ayudaron positivamente; nos proporcionaban los uniformes de los alentadores, banderitas y también almuerzos y entradas gratuitas; al principio no estaban de acuerdo con ayudarnos. Muchas organizaciones religiosas prometieron venir para animar, pero ninguna cumplió su promesa. Es por eso que nuestro ánimo se convirtió en el centro de atención”.
Durante los Juegos Asiáticos, los alentadores de la Iglesia de Dios desempeñaron el rol diplomático no gubernamental. No detuvieron las actividades de los alentadores hasta el 14 de octubre, día de la clausura.